El Congreso Nacional aguardaba que en las próximas horas el Gobierno Nacional envíe el paquete de proyectos de ley que se deben analizar en las sesiones extraordinarias, que comenzaron hoy y finalizarán a fines de enero, medidas entre las que figuran una reforma del impuestos a las ganancias, una amplia reforma del Estado y la implementación del sistema de boleta única electoral.
Fuentes parlamentarias del oficialismo señalaron que "esta noche o mañana a más tardar" se enviarán los proyectos como había anticipado esta mañana el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien señaló que es "inminente" que se giren las iniciativas al Parlamento.
Desde el oficialismo de la Cámara de Diputados señalaron a Télam que este jueves se armarán las comisiones de Asuntos Constitucionales, de Presupuesto y Hacienda, Legislación General y Relaciones Exteriores que deberán tratar los once proyectos que están incluidos en la convocatoria de sesiones extraordinarias.
De acuerdo al armado que está efectuando el presidente de la cámara baja, Martín Menem, dos corresponderán a la Libertad Avanza y dos a bloques aliados como sucedió con Presupuesto, cuyo titular será José Luis Espert, según anticipó el sábado pasado el presidente Javier Milei.
La mayoría de los proyectos incluidos en extraordinarias ingresarán por diputados, ya que la reforma del Estado -conocida como ley ómnibus- contempla temas impositivos y lo mismo sucede con los cambios en ganancias.
Además, en forma paralela a la conformación de comisiones, comenzarán las conversaciones con los bloques que estarían dispuestos a acompañar al oficialismo, como la UCR, Pro, Cambio Federal y Hacemos por Córdoba.
De todos modos uno de los proyectos que demandará mayores esfuerzos al oficialismo será la amplia reforma del Estado, ya que no solo contemplará temas impositivos como el blanqueo de capitales, bienes personales y retenciones, sino que podría incluir cambios en la ley previsional para dejar sin suspenso la fórmula con la que se actualizan las jubilaciones, entre otros temas.
Según anticipó el asesor presidencial Federico Sturzenegger, uno de los principales autores del DNU que publicó el Poder Ejecutivo y ahora tiene que ser revisado por el Congreso, la reforma del Estado que se plantea por ley será amplia.
“Va a venir un paquete que vamos a llevar al Congreso, que es todavía más sustancioso y más grande (en comparación con el DNU). La Presidencia arranca con contundencia, con cosas concretas que no habíamos visto antes”, aseguró Sturzenegger.
El proyecto vinculado a las modificaciones al impuesto a las Ganancias intentará revertir lo aprobado en septiembre pasado, cuando solamente pasaron a pagar el impuesto los trabajadores con salarios brutos en torno a los 2.000.000 de pesos.
Si bien se desconoce la letra chica de la iniciativa que será enviada para su discusión legislativa, los cambios que impulsa el Ejecutivo implicarían que pasen a pagar ganancias quienes tengan salarios brutos mensuales superiores a un monto alrededor de los 975 mil pesos.
La cuestión de estos cambios en el gravamen formó parte de la reunión que el presidente Javier Milei mantuvo con los gobernadores luego de asumir al frente de la Casa Rosada.
Los mandatarios provinciales vinculados a Unión por la Patria (UxP) están en contra de que sus diputados aprueben la iniciativa, y prefieren que lo que perdieron en sus distritos por la disminución de la cantidad de personas que pagan Ganancias se compense por otros tributos, como por ejemplo el impuesto al cheque.
Otra de las iniciativas parlamentarias en las que buscará avanzar el Gobierno durante las sesiones extraordinarias tiene que ver con los cambios en el sistema electoral a nivel nacional, donde se aspira a pasar del actual modelo de votación con las llamadas “listas sábanas” al modelo de Boleta Única Papel (BUP), un sistema que ya rige, por ejemplo, en la provincia de Santa Fe.
El proyecto de Boleta Única de Papel (BUP) fue aprobado por Diputados en junio de 2022 por 132 votos a favor del radicalismo, el PRO, el peronismo disidente, la Coalición Cívica y La Libertad Avanza, además de bloques menores de identificación con partidos provinciales.
En contra votaron 104 diputados, en su mayoría del interbloque del Frente de Todos, entonces el oficialismo; en tanto que la izquierda prefirió abstenerse.
La iniciativa pasó al Senado donde fue girada a las Comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia y Asuntos Penales donde nunca se puso a debate.
Como fue aprobada en 2022, todavía tiene un año más de vigencia, por lo que vencería recién a fines de 2024.
El proyecto que llegó de Diputados establece que el sistema de Boleta Única de Papel se aplicará para las PASO y las elecciones generales para elegir presidente, vicepresidente, senadores, diputados y legisladores del Mercosur, aunque en estas últimas dos categorías solo aparecerán nombres y fotos de los primeros cinco candidatos.
Además, se permitirá votar la lista completa y utilizar, si así lo autoriza el sistema electoral provincial, el esquema BUP, pero se deberá hacer en boletas y urna separadas, tal como se hizo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en las últimas elecciones con las Boleta Única para elegir jefe de Gobierno.
Por otro lado, el proyecto también vuelve a autorizar el voto por correo electrónico a los extranjeros que se aplicó hasta las elecciones de 2019.
Las otras iniciativas incluidas en el llamado a extraordinarias tienen que ver por un lado con el pedido de autorización al Congreso para que Milei pueda ausentarse del país durante el año próximo cuando lo imponga la agenda de Gobierno.
En este sentido, el Presidente de la Nación tiene previsto ya un primer viaje para 2024, cuando visitará a mediados de enero el Foro de Davos, el encuentro de empresarios y políticos de todo el mundo que se realiza todos los años en esa localidad suiza.
Por último, el paquete legislativo a ser tratado en extraordinarias también incluye la eliminación de la llamada “doble imposición” en materia impositiva para empresas de distintos países que operan en Argentina.
Entre los países beneficiados por esta iniciativa están Japón, Luxemburgo, China, Emiratos Árabes Unidos y Turquía.
El Gobierno argentino había firmado convenios con estos países en los últimos años para evitarle a sus empresas la doble imposición (es decir pagar impuestos en sus países de origen y en la Argentina), pero estos convenios no habían tenido aplicación concreta porque no contaban con aval legislativo.